El festival de las Elecciones Primarias del GOP de la Florida empieza en serio después de Carolina del Sur. En el estilo perennal que es la estrategia de los candidatos del GOP en cuanto a la política de la Florida y el voto rígido a favor del embargo, todo se basa en un concurso de los candidatos, mismos que se ponen a gritar fuego y diabluras acerca de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba - para ver que tal en contra de Castro cada candidato puede ser para sobresalir de los demás. Salvo de declarar una invasión militar de Cuba, es casi cómico escuchar cuan severos los candidatos serían en cuanto a Cuba si fuesen Presidente. “Vamos a multiplicar los fracasos” es el tema común sobre las relaciones entre Estados Unidos y Cuba. La verdad es que los tres candidatos son débiles en cuanto a Cuba.
Mitt Romney, Newt Gingrich, y Rick Santorum son efectivamente ignorantes sobre la realidad de nuestra relación con Cuba. Nunca han visitado a la isla y solo saben lo que les dice el sexteto de rígido cubano-americanos en el Congreso. No entienden que nuestra política hacia Cuba es esencialmente la destrucción socio-económica mutualmente asegurada y que apenas previenen cualquier influencia democrática. Ellos no se dan cuenta de que la Ley Helms Burton es probablemente unas de los peores pedazos de legislación aprobadas en la historia reciente del Congreso, ni cuantos problemas ha creado para nuestras relaciones con otros países, y despojado a la cámara ejecutiva de legítima autoridad constitucional. Evidentemente saben poco sobre la historia Cubana y nuestros sórdidos, corruptos acuerdos con los gobiernos Cubanos del pasado y los líderes o dictadores encargados de Cuba antes de la revolución. Como hipócritas apoyan gastosos programas públicos como Radio TV Martí y los programas de “democracia” por USAID que ponen americanos como Alan Gross en peligro y no promueven la democracia. Pero rayos, si quieren balancear el presupuesto federal y poner alto al mal-uso de los fondos públicos….
En vez de reconocer el fracaso de nuestros cincuenta años de política de aislamiento y humillación hacia Cuba, todavía se ponen a alcahuetearle a esta comunidad (es cierto que tienen mucho dinero y son generalmente cohesivos en sus votos). Prefieren decirles lo que ellos quieren oír en vez de ser líderes y contarles lo que deben escuchar, que ya es hora de parar la farsa de la política de Estados Unidos hacia Cuba. El embargo y las restricciones de viaje no funcionan. Nuestras sanciones solo traen miseria a Cuba, al pueblo Cubano, y a nosotros mismos. La visión de “Cuba libre” que mantienen ellos no es ni remotamente posible en tal ambiente. El gobierno Cubano y los hermanos Castro han usado su soberanía nacional en una forma muy efectiva como un escudo en contra de la política horrorosa de los últimos cincuenta años. Con el tiempo, un cambio democrático y pluralista evolucionará en Cuba. Sí, los cubanos quieren cambio, pero no a los mandatos de nuestro gobierno ni a sus hermanos en la Florida y Nueva Jersey, especialmente los que son descendientes del gobierno de Batista y que en la actualidad controlan el Congreso. Existen razones históricas por las cuales solemos ignorar porque este es el caso. Una nueva generación de cubano-americanos con familia en la isla va a cambiar esta dinámica. Ellos se unen a millones de otros americanos de todo el país que desean negociar con y visitar a Cuba. Quieren una nueva relación con nuestros vecinos soberanos por toda Latino America, incluyendo a Cuba.
Los cubano-americanos que continúen promoviendo nuestro fracaso son esencialmente una generación perdida, eligiendo ser impotentes y tener delirios por no querer admitir la verdad de nuestro fracaso y tener el coraje y el carácter humano para cambiar. Pero bueno, los políticos seguirán tomando su dinero y diciéndoles lo que quieren oír. En el documental “Will The Real Terrorist Please Stand Up” (Que El Verdadero Terrorista Por Favor Se Ponga De Pie), un locutor de radio en Miami, mismo que apoya la política rígida hacia Cuba, hizo referencia a su ciudad como una ciudad de “víctimas” para justificar nuestra política de locura. ¿Por qué es que nuestros líderes y candidatos políticos no les hacen recordar la dura verdad, que no hay poder en ser víctima?
Solo un candidato del GOP tiene una idea en cuanto a la dirección que debemos tomar, el Congresista Ron Paul (R-Tx). Igual que era el Senador Barack Obama en su posicion antes de hacerse Presidente, Ron Paul sabe que nuestro embargo y restricciones de viaje son dinosaurios de la guerra fría y se opone a estas políticas estúpidas. Paul entiende el fracaso de la política y la necesidad de parar la interferencia americana e institucionalizar políticas positivas de influencia americana. Similarmente, Paul ha sugerido algo que es el anatema a los de la política rígida en la Florida-sentarnos con nuestros adversarios a hablar de varios asuntos, con más importancia los asuntos humanos de Alan Gross y los Cinco Cubanos encarcelados en los dos países. ¿Por qué debe perder la diplomacia en un mundo que, ahora mismo, tanto lo necesita?
A través de su tradición electoral de alcahuetear, estos candidatos del GOP, con la excepción de Ron Paul, demostrarán lo débiles, ignorantes, y arrogantes que mantendrán este país cuando se trata de relaciones entre Estados Unidos y Cuba. Como se ha dicho antes, esto se trata simplemente de votos y dinero. La verdad, el sentido común, y la lógica se retiraron de la política entre Estados Unidos y Cuba desde hace más de cinco décadas. ¿Tendremos un Presidente que va a ser capaz de restaurarlos en el próximo turno a la Presidencia?
[Traducido de ingles al espanol por Ileana Abreu]
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